La depilación por sonda de temperatura tiene una acción degenerativa sobre las células germinativas del vello sin afectar, por ello, a las otras células, con ello conseguimos un debilitamiento progresivo del vello, a la vez que se retardará su aparición. Se utiliza bien después de la depilación con cera con lo que se obtienen resultados progresivamente o bien después de la depilación eléctrica con lo que aumentamos su efecto de destrucción del bulbo piloso. Lo ideal para alcanzar unos resultados óptimos es un tratamiento combinado |